Mencionan que ya se está trabajando en los mecanismos para reabrir estos espacios.
Con la suspensión de todas las actividades escolares, también se cerraron las tienditas escolares, concesiones que se plantean puedan ser habilitadas nuevamente tras el retorno presencial a las aulas.
Marcelina Sagrero Balado, directora de Educación Básica en la zona norte, explicó que ya se está trabajando en los mecanismos para reabrir estos espacios, ya que volvió la actividad de los alumnos en las escuelas.
“Todavía no tenemos fecha, pero ya se está trabajando. Una vez que revisemos las bases, van a regresar las personas que hacen las licitaciones y entonces se van a empezar a aperturar, pero hasta que tengamos eso”, dijo.
Sin embargo, como parte del plan de regreso a clases, se emitieron las reglas y criterios que deberán seguir los concesionarios para poder aperturar las tiendas escolares.
De acuerdo con el documento emitido tanto por la Secretaría de Educación, como la de Salud del estado, las personas que deseen reintegrarse deberán acatar las disposiciones sanitarias, como establecer círculos de circulación (entrada y salida) con al menos 1.5 metros de distancia entre estudiantes.
El espacio de la tienda escolar deberá ser abierto y estar ventilado, de lo contrario, las actividades se limitarán a venta para llevar.
Asimismo, se indica que los recesos deberán ser de manera escalonada para no tener aglomeraciones, y el personal deberá utilizar de manera obligatoria mandil, cofia, cubrebocas, gel antibacterial o lavado de manos constante y trabajar con uñas cortas y sin esmaltes.
También se sugiere la instalación de una barrera de plexiglas o plástico que separe a los alumnos de los vendedores, quienes deberán entregar alimentos de manera individualizada, es decir evitar servicios tipo buffet para evitar contagios.
Además, las opciones que se ofrezcan a los alumnos deberán cumplir con los requerimientos de una dieta balanceada, ya que Quintana Roo es el segundo estado con mayor índice de obesidad infantil y juvenil.
Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2018, el 22.8%, alrededor de 73 mil 487 de los 334 mil 034 jóvenes y adolescentes entre 12 y 19 años, tienen una acumulación anormal o excesiva de grasa.
