Falta de obra pública, garantías de trabajo y el flagelo del crimen organizado en las obras, ensombrecen el tradicional festejo de los alarifes.
En Quintana Roo trabajan 95 mil albañiles, sin embargo, como sector productivo, poco o nada tuvieron que celebrar en el Día de la Santa Cruz.
Estos alarifes representan 53% de los empleos que el sector tenía en 2019, antes de la pandemia. Quedan aún 47% de fuentes laborales por recuperar, sin embargo será complicado lograrlo este año.
En 2019 se tenían aproximadamente 180 mil empleos en el sector, pero existe una situación complicada y será difícil el recuperarlos, derivado de que la obra pública está prácticamente detenida al ser un año electoral, detalló Juan Chilón Colorado, secretario del Sindicato de Trabajadores, Obreros y Empleados de la Industria de la Construcción (SITEC), en Quintana Roo
Para él este año no se tuvo nada que festejar hoy 3 de mayo, sobre todo al no tener obra federal, que representaba 30% de los puntos de trabajo para el sector de la construcción, y que ahora están inactivos.
En el SITEC están trabajando con las autoridades para mantener la seguridad en las obras que en los últimos años han sido víctimas del crimen organizado, además de que los trabajadores cuenten con las prestaciones y condiciones laborales.
“No creemos que a diciembre recuperemos el empleo y esto también llevará a tener más adelante una escasez de alarifes, pues estados como Yucatán están requiriendo mano de obra para que aquellos locales que ahora están desempleados migren”, explicó.