Bacalar, 25 de octubre (Infoqroo).- El restaurante Costera 28, bajo la dirección del chef Carlos Meléndez, se ha convertido en un referente de la gastronomía innovadora en Bacalar, y uno de sus platillos más aclamados es el mole rosado, una propuesta única que combina tradición e innovación.
Este platillo, inspirado en una creación de los años 80 de la chef y experta en gastronomía mexicana Alicia Gironella De’Angeli, rinde homenaje a la cantera rosa de Taxco, lugar donde nació la receta.
El mole rosado es, en esencia, un plato que destaca por su color y su sabor suave y ligeramente dulce, gracias a la mezcla de betabel y chocolate blanco.
“El piñón rosa, que era el ingrediente especial en la versión original de la chef Gironella, es difícil de conseguir y tiene un costo elevado. Así que usamos una combinación de nueces, avellanas, almendras y otros frutos secos que logran un sabor similar”, explicó Meléndez.
Además de su característico tono rosa, el mole incluye un destilado o fermentado mexicano, como tequila, mezcal o incluso pulque, que añade profundidad al sabor y lo conecta con la esencia de los ingredientes tradicionales de México.
Meléndez asegura que el mole rosado ha captado la atención de sus comensales, quienes lo describen como un plato elegante, con un toque dulce y un leve picor.
Aunque este mole aún no es tan conocido como el clásico, Meléndez afirma que su popularidad está en ascenso.
“Es un platillo que cada vez tiene más adeptos. La textura sedosa, el color distintivo y el sabor sutil lo convierten en una experiencia para el paladar”, añadió el chef, quien ve en este mole una oportunidad para resaltar la riqueza de la gastronomía mexicana.
Con propuestas como el mole rosado, Costera 28 continúa posicionándose como un destino culinario de Bacalar, donde la tradición y la creatividad convergen en cada plato.