La emblemática figura del “Burrito Sabanero” de Cancún, convertido en un ícono navideño en el Caribe mexicano, generó conmoción y curiosidad después de su caída durante la tarde-noche del domingo 10 de diciembre. La estructura, también conocida como el “burrito de fornite,” ubicada en el Malecón Tajamar, cayó debido a la fuerte lluvia eléctrica que azotó la ciudad, dejando a la comunidad intrigada sobre su apariencia interna.
La estructura, que medía 14 metros de altura, 4.09 metros de ancho y 8.29 metros de largo, reveló sus entretelas tras el incidente. Las imágenes capturadas mostraron que la composición del “Burrito Sabanero” estaba mayormente construida con madera, con un armazón metálico similar al utilizado en obras de albañilería.
La base estaba conformada por tablas de madera, y varias piezas alargadas del mismo material se ensamblaban para formar un andamio. Toda la estructura estaba cubierta con telas coloridas en tonos amarillos, rosas, verdes y azules. Durante la noche, las luces navideñas exteriores iluminaban la figura, generando asombro y alegría entre los habitantes de Cancún, quienes no dejaban pasar la oportunidad de capturar fotografías de esta llamativa decoración.
Sin embargo, la fuerte lluvia y viento que azotaron Cancún el 11 de diciembre provocaron la caída del “Burrito Sabanero”. Hasta el momento, las autoridades no han confirmado si la estructura será reconstruida. La presidenta municipal informó que, debido a las afectaciones climatológicas, se suspendieron las actividades de la Villa Navideña Cancún, sin especificar sobre la posible restauración del icónico adorno navideño.