La industria tecnológica sigue siendo un entorno hostil para muchas mujeres. Así lo refleja un nuevo estudio desarrollado por Accenture y la organización sin ánimo de lucro “Girls Who Code”. Concretamente, el informe hace hincapié en el área de liderazgo de estas empresas, incluyendo la conocida como C-Suite (CEO, CFO, CCO, etc.) y otras posiciones estratégicas.
Así mientras que el 77% de los líderes empresariales que han sido consultados para este estudio consideran que sus organizaciones empoderan a las mujeres, únicamente un 54% de estas se muestran de acuerdo. Y mientras que el 45% de los altos ejecutivos afirman que para las mujeres resulta sencillo progresar en su carrera profesional en una compañía tecnológica, solo el 21% de las mismas coinciden en este aspecto, reduciéndose este porcentaje hasta el 8% en el caso de las minorías étnicas.
En el estudio, para el que se entrevistaron a más de 2.000 trabajadores, se quiso profundizar en los motivos que convierten precisamente a este sector en uno de los más complicados de destacar si se es mujer.
En este sentido, según el informe la disparidad tiene mucho que ver con la cultura corporativa y la diferencia de acceder a unas oportunidades que en muchos casos discriminan antes de comenzar una carrera profesionaly que también se reflejan en ambientes complicado en el entorno universitario o incluso, en la escuela secundaria.
Estos factores, combinados con entornos de trabajo que no son siempre ideales, provocan según Accenture que más del 50% de las mujeres que desempañan funciones tecnológicas abandonen el sector antes de los 35 años.
Falta inclusividad y políticas laborales adecuadas
Para los autores de este estudio, buena parte de los problemas que se dan en el entorno laboral tienen su origen en los departamentos de recursos humanos. Aseguran en este sentido, que los responsables de determinar cómo se contrata, de qué forma se trabaja o cómo se promueve el cambio, “a menudo sobreestiman lo seguro y lo acogedor que es su lugar de trabajo, al tiempo que subestiman lo difícil que es para las mujeres desarrollar sus carreras en en el campo tecnológico”.
Esta brecha de percepción es clave, afirman, porque el liderazgo subestima la inclusión en el lugar de trabajo y sigue centrado en la contratación de mujeres cuando existe un problema de desgaste. Así, el documento indica que los líderes tienden a centrar sus esfuerzos en la contratación, en lugar de retener a las mujeres válidas y promover su ascenso. El énfasis en la contratación provoca que sea menos probable que las mujeres avancen en su carrera dentro de una empresa y que por lo tanto, alcance posiciones de liderazgo al mismo nivel que los hombres.
La buena noticia es que según el mismo estudio, esta tendencia se puede cambiar. De hecho, Accenture y Girls Who Code han identificado cinco prácticas que permitirían hacerlo: fortalecer la conciliación laboral y familiar, seleccionar de forma activa a mujeres para liderar equipos de trabajo, desarrollar programas de mentoring específicos para mujeres, recompensar a los empleados por su creatividad y programar eventos de networking abiertos.
Fuente: muycomputerpro