Por su parte, la alcaldesa de Benito Juárez aseguró que no permitirá que los taxistas afecten la imagen del destino.
Diferentes sectores advirtieron que las agresiones y ataques que realizan los taxistas de Cancún en contra de choferes de la plataforma de transporte Uber afectan la imagen del destino turístico a nivel nacional e internacional.
Sergio González Rubiera, cónsul de Noruega, señaló que los taxistas deben comprender que los usuarios piden el servicio que proporciona la empresa transnacional a través de su aplicación y no realizar ataques que sólo manchan la imagen de la ciudad.
El también presidente de la Asociación Mexicana de Agencias de Viajes (AMAV) responsabilizó a las autoridades, al no acatar el fallo del juzgado federal ni sancionar a los taxistas involucrados en los ataques y amenazas.
González Rubiera reiteró que los ataques y amenazas de los taxistas de Cancún no sólo afectan a los turistas ni a la imagen de la ciudad, sino a toda la ciudadanía, que pide que Uber preste su servicio en el estado.
Alcaldesa de Benito Juárez envía mensaje a taxistas de Cancún
Por su parte, Ana Patricia Peralta de la Peña, presidenta municipal de Benito Juárez, emitió a través de sus redes sociales un video dirigido a los taxistas de Cancún en el que advierte que no permitirá que se afecte la imagen del destino ni la seguridad pública por los intereses de un grupo.
Hizo un llamado a los trabajadores del volante, a quienes consideró como “pieza fundamental para la atención al turista”, a evitar confrontaciones y cuidar tanto a los cancunenses como a los visitantes, por lo que los instó a innovar y superarse.
La presidenta municipal concluyó su mensaje al asegurar que considera que “el camino que nos va a beneficiar a todas y a todos es el de la ley, el diálogo y la paz”.
Cabe recordar que el domingo pasado, fueron aprehendidos cuatro taxistas de Cancún y una chofer de Uber, por alteración del orden público. A los primeros, se les impuso una multa, mientras que a la trabajadora de aplicación sólo se le amonestó, pero todos ellos debieron pagar el arrastre de la grúa y la estancia de sus vehículos en el corralón.
