Expertos en gestión del aire han instado a implementar la participación ciudadana en el sistema de monitoreo de calidad del aire en Quintana Roo, México. Según Roberto Muñoz Cruz, consultor para la adaptación climática de la Asociación Política y Legislación Ambiental (Polea), es crucial establecer un modelo de gobernanza social en el monitoreo del aire para coordinar esfuerzos entre el sector público y la sociedad civil.
El sistema de monitoreo actual en Quintana Roo cuenta con 11 sensores Purple Air distribuidos en seis municipios, según la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente (Sema). Sin embargo, Muñoz Cruz señala la necesidad de una mayor cobertura y actualización constante de los datos. Esto permitiría no solo la emisión de alertas ambientales cuando sea necesario, sino también proporcionar información relevante para la salud pública.
Muñoz Cruz destaca la importancia de la participación de diversos grupos, como la sociedad civil, académicos, investigadores, servidores públicos y legisladores, en este proceso. Además, enfatiza la necesidad de considerar a grupos vulnerables, como personas con enfermedades crónicas o discapacidades, al desarrollar medidas de mitigación.
Selene Martínez, directora ejecutiva del Observatorio Ciudadano de Calidad del Aire del Área Metropolitana de Monterrey, subraya el papel crucial de la sociedad civil en este proceso. Martínez destaca la importancia de que la información sobre la calidad del aire esté disponible en tiempo real y sea accesible al público para que pueda tomar medidas adecuadas en caso de contaminación.
Actualmente, proyectos similares de gobernanza social de calidad del aire están en marcha en otras zonas metropolitanas de México, como Guadalajara, Monterrey, Toluca y el Valle de México.