La icónica avenida Yaxchilán de Cancún experimenta un cambio significativo con la demolición del legendario restaurante Perico’s, marcando el cierre de una era en el corazón de la ciudad. Situado en el número 61 de la avenida, detrás del parque de Las Palapas, Perico’s fue durante décadas un referente turístico, siendo testigo de la evolución y la animada vida nocturna de Cancún desde los años 70.
Tras 47 años de historia, en 2019, la administración del restaurante anunció su cierre en redes sociales, insinuando una posible reubicación que nunca se materializó. Desde entonces, el edificio, con su distintivo letrero y peculiar arquitectura, quedó abandonado, siendo un recordatorio nostálgico de épocas pasadas.
La demolición de Perico’s ha suscitado diversas reacciones entre los ciudadanos, incluyendo a destacadas figuras como Fernando Martí, cronista de la ciudad, quienes han destacado la importancia de preservar la memoria histórica de Cancún. Se ha planteado la necesidad de crear una lista de edificios históricos que sirva como legado para las futuras generaciones, incluso si son de naturaleza comercial.
Aunque el restaurante Perico’s fue un lugar emblemático, su abandono contribuyó a la percepción negativa de la avenida Yaxchilán, como expresaron varios usuarios en redes sociales. La demolición generó asombro y nostalgia, con comentarios en línea que reflexionaron sobre la evolución de Cancún a lo largo de los años.
En este contexto, algunos usuarios lamentaron la demolición, destacando la importancia de documentar la estructura antes de su desaparición, con la esperanza de que las autoridades hayan capturado imágenes que puedan servir como parte de la historia visual de la ciudad o incluso como material para un futuro museo.
La demolición de Perico’s no solo marca el final de un lugar emblemático, sino que también despierta la reflexión sobre la preservación de la identidad histórica en medio del crecimiento y desarrollo constante de Cancún.
